Pandemia mundial: efectos para las empresas y organizaciones
Benito Barros. 16 Mar, 2020 11 NOV, 2019
La Organización Mundial de la Salud (OMS), ha declarado el coronavirus, como una Pandemia Sanitaria Mundial, que puede causar estragos a un porcentaje muy alto de la población. En estas últimas semanas, hemos visto de qué forma un problema exógeno a la realidad de muchas organizaciones, nos puede afectar de tal manera, que puede poner en Jaque y en un riesgo inminente, a las operaciones y resultados de las empresas. Es que hay alguien que no se vea afectado. Muchos países han limitado la circulación de personas, los viajes, el transporte, la suspensión de eventos masivos, ligas deportivas, clases en los establecimientos de educación escolar y superior, propuestas de protocolos que invitan a reducir los contactos, a desarrollar el Home work, a tomar los recaudos sanitarios y minimizar los riesgos de contagio. La propagación del virus es exponencial y sus consecuencias incalculables. Hoy vemos cómo se derrumba el mercado de capitales, el efecto en la hotelería, en el turismo, en las ventas, en el transporte aéreo, en las proyecciones macroeconómicas de las naciones y en fin, en los efectos en la tranquilidad, tensión y calidad de vida de la población.No es primera vez que la humanidad enfrenta una situación crítica y una amenaza tan fuerte y con tan severas consecuencias. Como no es la primera vez, las organizaciones deben tener un plan de contingencia para enfrentarlo, dado que la experiencia nos ha invitado a aprender de que somos tan vulnerables, que una situación o estímulo externo, puede incrementar el riesgo operacional y financiero de la empresa, hasta dejarnos en el corto plazo, en una posición de default. Ello ya se aprecia en los mercados de capitales, y sobre todo en la reacción de las instituciones financieras en todo el mundo. La estrategia de CONSERVADOR será la primera que apliquen los organismos de inversión, créditos y financiamiento. La pregunta de fondo, y la razón de ser de estas columnas. ESTAMOS VERDADERAMENTE PREPARADOS COMO EMPRESA, PARA ENFRENTAR UNA CRISIS Y UNA AMENAZA TAN RELEVANTE COMO LA QUE SE VIVE A NIVEL MUNDIAL. Estoy casi seguro que las dudas y la incertidumbre se ha apoderado de muchos directivos y ejecutivos. Sin embargo debemos complementar la pregunta con la siguiente: Qué acciones hemos desarrollado en los últimos años, para enfrentar amenazas de todo tipo, que provienen del entorno. En las crisis y en las amenazas, se producen oportunidades, es así, grandes oportunidades para enfrentar con éxito y salir fortalecidos como institución, del clima tan adverso que nos toca sobre llevar. Ahora, si no estamos preparados, o nunca ha sido nuestra preocupación, el riesgo de que nos ponga en jaque, verdaderamente se multiplica en una forma impensada. Qué debemos hacer, qué medidas debemos tomar para mitigar el impacto de una situación que afecta desde ya, la normalidad de todas las operaciones comerciales y financieras en el mundo. He aquí unas ideas (que sin el afán de dar soluciones de escritorio), solo buscan iluminar o despertar la necesidad de salir jugando.
- En primer lugar, reconocer fehacientemente que enfrentamos una crisis sin precedentes. El reconocimiento es clave para tomar acciones inmediatas. Por favor, no esperen que en el corto plazo todo sea totalmente normal.
- Establecer mecanismos de inteligencia y formar equipos de impacto, que definan acciones de choque, para enfrentar la caída de nuestras cifras de operación.
- Es la variable más inmediata que se ve afectada. Si no se cuenta con una espalda financiera o un capital de trabajo suficiente para enfrentar los egresos de los próximos 6 meses, es necesario procurar una reingeniería financiera, evaluando todas nuestras obligaciones, compromisos y potenciales fuentes alternativas de ingreso.
- Punto de equilibrio. Debemos ser capaces de definir el rango mínimo de actividad en la empresa, que nos permita seguir operando en condiciones de crisis económica. Conociendo ese nivel mínimo de actividad, ajustar las estrategias para alcanzarlo y superarlo.
- La reflexión racional de nuestras decisiones, nos invitan a actuar con precaución, tomando en consideración que una mala decisión, puede estresar la caja actual y poner un alto grado de incertidumbre en el futuro inmediato.
- Racionalización y optimización de costos y gastos. Debemos ser capaces de operar con una mística de máxima eficiencia y economicidad en el uso de los recursos. Optimicemos, racionalicemos, eliminemos y alcancemos resultados con el uso más adecuado de los recursos.
- Debemos ser capaces de cuidar a nuestros colaboradores, estableciendo las condiciones de higiene y seguridad necesarias, para proteger su integridad, la nuestra y la de todas nuestras familias. En ese sentido, formar grupos de trabajo y de tareas, en que los trabajadores vayan conociendo con total transparencia lo que está ocurriendo y cómo nos está afectando. Solicitar su compromiso, su apoyo, su esfuerzo, sus ideas y toda iniciativa que conduzca a enfrentar y superar.
- Diversificación de operaciones. Seamos creativos en la estrategia para buscar permanentemente nuevos modelos de negocio, que aprovechando nuestras sinergias, nos permitan alcanzar focos y nichos de operaciones, que pueden resultar verdaderas oportunidades para fortalecernos
Por último y lo más importante, pongámonos en manos del Altísimo, para que nos acompañe y nos proteja frente a esta gran amenaza.