Imperiosa necesidad de fortalecer la gestión financiera
Benito Barros. 15 Jun, 2020 11 NOV, 2019
El vivir una situación tan extrema, como esta pandemia mundial, son muchos los agentes económicos que se ven altamente afectados. El crecimiento de la actividad económica está llamado a un marcado retroceso en sus coeficientes, lo que pone en peligro la estabilidad laboral, los niveles de consumo, el estancamiento de la cadena de pagos y un recalentamiento de la economía. El Estado juega un rol subsidiario notable, pero lamentablemente los recursos son limitados y las opciones de mantener un equilibrio en los mercados se muestra como una misión casi imposible. Es en este escenario donde surge la necesidad de que los gerentes y directivos de las empresas u organizaciones, se concentren en el fortalecimiento de la gestión financiera de sus negocios. Por ello en estas líneas veremos los elementos relevantes que orienten a los ejecutivos a alcanzar un alto nivel de Fortalecimiento financiero.
- Una gestión estratégica potente, que muestre claridad de los objetivos de mediano y largo plazo y de la posición competitiva que la empresa espera alcanzar en los próximos meses y años. Ello sumado a una misión corporativa claramente establecida y difundida a todos los miembros de la organización.
- Una estructura de gobierno eficaz y eficiente, que permita implementar los planes y proyectos, en el marco de un mecanismo de toma de decisiones altamente participativo, con políticas y procedimientos claramente establecidos, y en donde cada miembro debe responder con su aporte a los resultados económicos y financieros.
- La implantación de un sistema de aseguramiento de la calidad, que permite, por una parte, operar en óptimas condiciones en todos los procesos, y por otra parte, entregar un satisfactor a los clientes, a través de productos y servicios de primer nivel.
- Contar con una cartera de clientes satisfechos, con alto grado de fidelidad, aplicando herramientas de vinculación permanente y de evaluación del grado de satisfacción de sus consumidores. EL propósito de toda organización exitosa se resume en maximizar la tasa de fidelización y maximizar la tasa de atracción de nuevos clientes. Con ello se alcanzará un crecimiento paulatino en el nivel de actividad.
- Establecer una estrategia de portafolio equilibrado de productos y servicios, que a través de la innovación permanente, permita ofrecer nuevas ofertas y buscar nuevos mercados. En cada una de estas nuevas unidades estratégicas de negocios, se busca alcanzar indicadores de aporte a la rentabilidad general del negocio.
- Disponer de mecanismos estratégicos de diferenciación de productos y servicios, de tal forma de ir agregando valor a la oferta competitiva y de esa manera ir alcanzando un mejor posicionamiento en términos de precios y de nichos de mercado. Se hace particularmente relevante en estos días, la incorporación de sistemas electrónicos y mecanismos de información y respuesta a los consumidores.
- La definición de políticas de ventas, con una estrategia comercial agresiva, con un control de las cuentas por cobrar y con una evaluación de riesgo de la cartera de clientes, en cuanto a les decisiones de flexibilizar los plazos de pago de las ventas a crédito. Sobre este punto, extremar los cuidados y actuar con suma cautela, a fin de no aumentar los riesgos de morosidad.
- Alcanzar un equilibrio financiero, que permita cubrir con un alto grado de liquidez, las necesidades, recursos, obligaciones y pagos que la empresa debe realizar en el corto plazo, evitando entrar en default o déficit de caja, pero al mismo tiempo evitando mantener fondos inmovilizados en las cuentas corrientes. Para ello, el desarrollo de buenos negocios que aporten resultados en el corto plazo, se transforman en las herramientas deseables
- Optimizar la gestión logística, de tal forma que los gastos de transporte y almacenaje, sean mínimos, pero controlando el riesgo de generar un quiebre de stock. La inmovilización de capital ocioso, debe evitarse a todo lugar.
- Maximizar la eficiencia en el uso de los activos fijos, particularmente las inversiones en infraestructura, maquinarias, equipos e instalaciones, buscando alcanzar elevados niveles de economías de escala.
- Establecer políticas y buscar opciones de apalancamiento financiero, que permita el uso racional de la deuda, con el menor costo financiero posible, y manteniendo un control de los niveles de riesgo de las deudas.
- Establecer procedimientos claros y efectivos, para la evaluación de inversiones, buscando alternativas de nuevos proyectos, que ofrezcan estudios de pre factibilidad comercial, legal, técnica, organizacional, financiera y económica. Dichas inversiones permitirán sustentar el crecimiento armónico de la empresa en el tiempo.
- Disponer de mecanismos de evaluación y control, que a través del uso de indicadores, y de sistemas de información claros y oportunos, ofrezcan los datos relevantes para hacer un seguimiento permanente de todas las actividades, controlando periódicamente los resultados y tomando las medidas correctivas necesarias y pertinentes, para mantener la línea estratégica planteada en las metas y objetivos.
- Contar con opciones de financiamiento alternativos, a través del uso de instrumentos financieros de renta variable, renta fija, intermediación financiera, entre otros, los cuales deben generar opciones alternativas para apalancar los nuevos proyectos y desafíos.